San Isidro: El chotis, evolución de un baile popular escocés, que se convirtió en el baile de Madrid es otro de los protagonistas de la fiesta.
Texto y fotos Alcides Nuñez Sanabria
En la Ermita de la Pradera de San Isidro, patrón de la ciudad de Madrid, todos los años miles de madrileños, vestidos de chulapos y chulapas dan rienda suelta a una de las fiestas más alegres de España.
La fiesta es un sin fin de bailes tradicionales como el Pasacalle castizo, pero también de disfraces, con gigantes y cabezudos, que han recorrido las calles de la capital, desde General Ricardo hasta el paseo de la Ermita del Santo.
Los madrileños se visten de chulapos y chulapas, adornados con una estética y cromática, en la que resaltan los Mantoncillos, claveles y el baile del chotis.
El chotis, evolución de un baile popular escocés, que se convirtió en el baile de Madrid es otro de los protagonistas de la fiesta. Los bailes entre las parejas que asisten a la Ermita, nos da baño visual, y nos permite trasladarnos a las primeras fiestas que marcaron los pasos de los danzantes en la Ermita.
También la fiesta tiene un tinte religioso, es la fiesta de San Isidro y los madrileños dejan notar si tapujos su religiosidad. El cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ofreció la tradicional misa campal de San Isidro.
Pero la fiesta de San Isidro sin comida y bebida no existiría. Largas colas de espera para beber o llevarse agua en botellas de la fuente milagrosa de la ermita del Santo, ya que dice la leyenda o el mito, que el patrón San Isidro, al dar con su bastón en la roca hizo que empezara a salir agua. La gente bebe por fe o por el calor que tiene Madrid en estás fechas.
Aficionado desde pequeño a la fotografía, formación en la fotografía profesional, fotoperiodismo y reportaje.